Después de unos días en Italia, estábamos deseando llegar a la India. El destino de Willy Fog fue Egipto. En cuanto a pasar o no pasar por dicho país, en clase dudaban: por una parte había quienes defendían visitar Egipto para ver sus pirámides, el desierto y por ser lugar en el que "habitan" momias; por otra parte, alguno de nuestros viajeros, con cierta prudencia, nos avisaba de que la zona de Egipto suele estar en guerra. Al final, más bien por cuestión de tiempo, decidimos viajar directamente a la India.
Ayudados por dos grandes bolas del mundo (una de ellas incluso tenía luz), hemos situado el origen y el destino de nuestro viaje, para apreciar la distancia entre los dos lugares.
Una vez en la India, hemos visitado su capital, Nueva Delhi. Allí hemos podido descubrir que las personas visten de forma diferente. Nos han contado que esos vestidos tan llenos de color, llamados saris, están hechos, en muchas ocasiones con seda, una tela muy suave que se hace con hilo del capullo del gusano de seda. Para muestra, un botón: nos han traído un cojín de dicho material. También nos han enseñado una imagen de un Dios con muchos brazos, incluso nos han traído una estatuilla.
Hemos visitado una de sus más grandes construcciones, el Taj Mahal. Nos han enseñado fotos del río Ganges. Para pagar, hemos descubierto que utilizan las rupias indias, y se habla en Inglés o en Hindi. Su comida es también diferente a la nuestra: los sabores se hacen más intensos porque utilizan especias. ¡Tenemos grandes expertos en la India.
Nos queda pendiente ver el capítulo correspondiente a la India de la serie de Willy Fog. Estamos impacientes porque, según nos han contado, es en el que nuestro protagonista rescata a Romy, princesa India, que se une a nuestro protagonista en su viaje.
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