Nos han hablado de los apicultores. Ellos se encargan de cuidar a las abejas. Procuran que tengan cobijo y comida durante el invierno, y cuidan su salud. A cambio, el apicultor, recoge parte de la miel, cera y polen. Para que no se enfaden las tranquiliza con humo y, para que no les piquen, les pone un traje especial. ¡Vaya panal tan rico que nos podemos llevar!
También nos han hablado de los barrenderos. No es que sólo trabajen en otoño, pero con la cantidad de hojas que se caen de los árboles, tienen mucho trabajo. Para realizar su trabajo, van vestidos con un traje especial y guantes, y utilizan con carrito, escoba, recogedor y cepillo enorme, para barrer más rápido todas las hojas.
Por último, nos han hablado de las castañeras, que en otoño aparecen en nuestras calles para que podamos probar ricas castañas calentitas. Tenemos una poesía preciosa, que vamos a aprender. Con el frío y muchas ganas de jugar, podemos jugar a castañeras.¡Buena idea!
Por último, una recomendación para excursión en otoño: Ver el nacimiento del río Urederra.
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